
EN CADA COLOR ABANDONADO
Hay un tiempo para los verdes que se pudren
y un compás para el amarillo de los locos.
En cada color abandonado,
una nota se reencuentra con sus muertos,
las calles abandonan su bozal, las ventanas
son el nuevo marco de los crucificados
que tienden los restos de sus pulmones al sol
y la palabra se hace carne lentamente
en el último andamio capaz de sujetar el mar.
MARIAN RAMÉNTOL
De su libro Los Muñecos diabólicos de mi caja de pájaros (IX Premio Vicente Núñez).
Imagen: Mujer perro, Paula Rego
Gracias Mª Jesús, tremendo poema. Creo que por ahí anda un verso mío también a "cada color que abandonamos".
ResponderEliminarUn abrazo,
Kike
Hay muchos tiempos, eso me parece, pero cual es el que buscamos?
ResponderEliminarGran poema
A.
Tremendo poema de tremendo poemario.
ResponderEliminarPor más que lo leo, me sigue sobrecogiendo.
Abrazos.