¿Cuánto podrá durar para nosotros
el disfrute del oro, la posesión del jade?
Cien años cuando más, ese es el término
de la esperanza máxima.
Vivir y morir luego: he aquí la sola
seguridad del hombre.
Escuchad, allá lejos, bajo los rayos de la luna
al mono acurrucado y solo llorar sobre las tumbas.
Y ahora llenad mi copa, es el momento
de vaciarla de un trago.
LI PO
(LI TAI PO poeta chino de la dinastia TANG siglo VIII DC, 700-762)
2 comentarios :
Extraordinario,
qué acertado recuperar este texto.
El saber que la vida tiene un final, y que eso es irrebatible, hace que ame la vida de una manera más intensa.
Por eso cuando vienen los testigos de Jehova prometiéndome la inmortalidad les digo: "quita, quita, qué horror" y las pobres mujeres se van escandalizadas.
Un texto muy bello y sabio.
Beos, Ada.
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