abril 30, 2010



Sobre tres cuadros de Miguel Barceló: Barca, La travesía del desierto y El amor loco.

A las manos de Miguel Barceló,

nos muestran un mundo que sólo él ve.

Intento el triple salto

mientras el aire golpea la luz

y los hilos rozan mis alas de insecto.

Cuento hasta diez, me dejo caer

y la goma elástica me proyecta

a una travesía del desierto

donde los hombres beben sus gritos

y se clavan en la arena como alfileres líquidos.

La pirueta en el polvo

es un viento encendido

que choca contra el espejismo de una barca.

Y caigo en la paleta sobre el gris que tu pincel recoge

y me envuelve y deposita en proa,

ahí es donde aprendí de memoria las nubes.

Y el hilo se alarga

y tu amor loco me eleva en los azules

y espero, dócil, que acudan los poetas

a morir en esta playa.

María Jesús Silva

Imagen: El amor loco de Miguel Barceló.

abril 28, 2010

abril 27, 2010


"Escribir es intentar saber qué escribiríamos si escribiésemos".

MARGUERITE DURAS

abril 25, 2010

HE LEÍDO


Cuentan que Mahoma, acompañado de sus seguidores, llegó a una ciudad para difundir sus enseñanzas. Inmediatamente se les unió un discípulo que vivía en aquella localidad. "Maestro, en esta ciudad te van a perseguir, calumniar y demonizar", le dijo preocupado. "Los habitantes son arrogantes y no quieren aprender nada nuevo ni diferente. Sus corazones están sepultados bajo una losa de piedra". Mahoma asintió sonriente y le respondió con serenidad: "Tienes razón".
Más tarde apareció otro discípulo de Mahoma que también vivía en aquella comunidad. Radiante de alegría, le dijo: "Maestro, en esta ciudad te van a acoger con los brazos abiertos. Los habitantes son humildes y están con muchas ganas de escucharte. Sus corazones están dispuestos a nutrirse con tu sabiduría". Mahoma asintió sonriente y de nuevo afirmó: "Tienes razón".
Incrédulo, uno de sus acompañantes se plantó delante del maestro y le preguntó: "¿Cómo puede ser que les hayas dado la razón a los dos si están diciéndote exactamente lo contrario?". Y Mahoma, impasible, le contestó: "No vemos el mundo como es, sino como somos nosotros. Cada uno de ellos ve a los habitantes de esta ciudad según su punto de vista. ¿Por qué tendría yo que contradecirles? Uno ve lo malo y el otro ve lo bueno. ¿Dirías tú que alguno de los dos ve algo errado? No me han dicho nada que sea falso. Solamente han dicho algo incompleto.

abril 23, 2010

JUAN RAMÓN JIMÉNEZ





Juan Ramón Jiménez (Moguer, Huelva, 1881 - San Juan, Puerto Rico, 1958) figura entre los clásicos indiscutibles de la literatura española. Algunos de sus libros principales: Almas de violeta (1900), Ninfeas (1900), La soledad sonora (1911), Rimas (1903), Jardines lejanos (1904), Elegías (1907), La soledad sonora (1911), Pastorales (1913), Platero y yo (1914), Estío (1916), Diario de un poeta recién casado (1916), Eternidades (1918), Piedra y cielo (1919), Dios deseado y deseante (1948), Animal de fondo (1949), Tercera antología poética (1957). Premio Nobel de Literatura en 1956.

Un poema:

EL OTOÑADO

Estoy completo de naturaleza,
en plena tarde de áurea madurez,
alto viento en lo verde traspasado.
Rico fruto recóndito, contengo
lo grande elemental en mí (la tierra,
el fuego, el agua, el aire), el infinito.

Chorreo luz: doro el lugar oscuro,
trasmino olor: la sombra huele a dios,
emano son: lo amplio es honda música,
filtro sabor: la mole bebe mi alma,
deleito el tacto de la soledad.

Soy tesoro supremo, desasido,
con densa redondez de limpio iris,
del seno de la acción. Y lo soy todo.
Lo todo que es el colmo de la nada,
el todo que se basta y que es servido
de lo que todavía es ambición.
JUAN RAMÓN JIMÉNEZ
Poema incluido en el libro La estación total con Las canciones de la nueva luz (Tusquets; Barcelona, 1994).
Imagen: regioncallao.gob.pe

abril 20, 2010

MÚSICA EN ÍTACA (9)

PACO DE LUCÍA

“La posguerra española del siglo XX luce sus ruinas en blanco y negro. El padre del niño es un guitarrista que ameniza las fiestas nocturnas de los señoritos gaditanos y que a la mañana vende verduras en un puesto instalado al aire libre. A pesar de sus esfuerzos, no puede seguir pagando los estudios elementales del hijo de nueve años, y éste abandona la escuela para aprender a tocar la guitarra. No es ninguna tragedia, a juicio de un chico despierto y laborioso cuya habilidad deslumbra al guía del flamenco de entonces: Niño Ricardo. Tanto trabaja encerrado en su habitación, que el vecindario cree que un disco gira sin parar en la casa de los Sánchez.

(…)

El padre vuelve a hincar su intuición en el centro de la diana: la familia Sánchez se establece en Madrid. Así saltan centellas cuando Camarón de la Isla y Paco de Lucía colaboran. Al cantante le hubiera gustado ser un virtuoso de la guitarra, y al instrumentista cantar con la potencia desgarradora de su compañero. Nunca, en la historia del flamenco, las pasiones insatisfechas han sido sustituidas con tanto acierto. Los dos jóvenes se juntan en cualquier barucho o esquina, buscan nuevas fórmulas, orillan dificultades y van sin prejuicios a los estudios de grabación. Cumplida esa etapa, poco a poco dejan de acompañarse, y no es por culpa de la vida bohemia de Camarón o del éxito de Paco, en 1973, con una rumba graciosa: Entre dos aguas. La costumbre no debe disminuir la intensidad con que han experimentado”.

FRANCISCO JAVIER IRAZOKI

(Fragmentos del libro La nota rota; Hiperión, 2009)

abril 18, 2010

LOS ESCRITORES Y EL CUESTIONARIO PROUST: MARIAN RAMÉNTOL (12)

- ¿Cuál es para ti la mayor desgracia?- La convivencia con el dolor en cualquiera de sus formas y estaturas. Siempre me ha sorprendido (y no gratamente) la capacidad del ser humano para advertirlo, olerlo, y hasta sufrir, ya no tan sólo el propio, si no el ajeno, pero mirar hacia otro lado rápidamente, como si la empatía fuera un “defecto de fábrica” pestilente del que huir a toda costa.

- ¿Dónde te gustaría vivir?- En una cabaña de madera, forrada de libros, a orillas de un charco muy grande, a ser posible que alcanzara la naturaleza de lago, y donde no importase que después del domingo llegara el lunes.

- ¿Cuál es para ti la alegría terrenal más perfecta?- Hay muchas situaciones que me provocan un estado de felicidad perfecta; resumirlas es tarea más difícil de lo que pueda parecer en un principio. Aun a riesgo de que suene un poco cursi, diré que me siento sumamente feliz cuando comparto una conversación sin prisa ninguna con mi compañero, se nos hacen las tres de la madrugada y no tenemos ninguna ganas de volver a mirar el reloj, o, por ejemplo, seguir siendo capaz de emocionarme con un amanecer o un crepúsculo, con la mirada de mi gato cuando me consuela, con la aparición de una hoja nueva en mi limonero, o en el peral que se ha pasado el invierno siendo un tronco escuálido, con un abrazo, o con un beso. Seguir descubriendo el poder de la palabra, su capacidad para cambiar mi realidad y la renovación permanente del pacto que hice con ella hace tiempo para trasladarnos juntas a otros escenarios, otros paisajes, otras trincheras, y conseguir volver ilesas del intento. O despertarme en plena noche, con tres versos hirviéndome en la cabeza, apuntarlos y volver a caer en brazos de Morfeo, ese es también un momento sublime.

- ¿Qué fallo perdonas más fácilmente?- El fallo en sí mismo. No creo en la perfección, por lo que no la exijo, en cada “supuesto fallo” hay siempre otra “verdad” que se nos escapa, en realidad la mayoría de las veces somos nosotros los que “fallamos” estrepitosamente al emitir juicios, yo siempre digo que “la verdad” se dice siempre en voz baja, y que hay tantas realidades como ojos observándolas. No siempre es fácil, lo reconozco, pero he aprendido con el tiempo que no existe un posicionamiento universal ante las cosas o los conceptos, así que eso que a veces tildamos de “poca implicación” o “demasiada manga ancha” puede ser en algunos casos una comprometida y consciente muestra de respeto.

- Tu héroe de ficción preferido.- Los Magos en todas sus versiones, los blancos, los grises, los negros, todos ellos. Son seres capaces de conectar de una manera directa con el inconsciente, y representan toda una parte del paisaje primordial del ser.

- Tu personaje histórico preferido.- No tengo marcadas preferencias en este sentido, la historia está repleta de grandes mujeres y hombres que han provocado cambios, adelantos, belleza, horror o movimiento, aunque sí diré que siento especial simpatía por los científicos, a saber por qué, y aunque no entienda ni jota de estos menesteres, nombres como Galileo, Copérnico, Madame Curie, o Einstein, por ejemplo, causan en mí cierto sentido de “deuda”.

- Tu heroína real preferida.- Mi madre, sin duda alguna. Fue un personaje eminente que luchó con valentía contra todos sus monstruos y de paso también con los míos, llevó a cabo la mayor de las hazañas, transmitirme los valores que hoy en día me conforman como lo que soy.

- Tu heroína preferida de la literatura.- Baya de Oro, o “la hija del Río”, compañera de Tom Bombadil (J. R. R. Tolkien), mujer líquida de gran atractivo dentro del fascinante mundo de ese grandioso mago llamado Tolkien.

- Tu pintor favorito.- La curiosidad casi mística por la experimentación siempre me ha fascinado, la habilidad para transformar el acto pictórico y trasladarlo a otras escenas, otros niveles u otras temperaturas me lleva de la mano hacia un Pollock indiscutible. Me parece “absoluto” un Pollock corriendo o danzando dentro de una tela extendida en el suelo, metido en su propio cuadro, derramando la pintura, dejándola gotear y actuando en la creación con todo su cuerpo, sí, sencillamente absoluto.

- Tu compositor preferido.- Wagner, porque además de compositor, director de orquesta, dramaturgo y teórico musical fue también poeta, para mí, que sufro de un grado de sinestesia avanzado, su tratamiento del drama consigue inundarme siempre los ojos de colores imposibles.

- ¿Qué cualidad aprecias más en un hombre?- La generosidad que inevitablemente implica una desarrollada empatía, creo que es una de las cualidades humanas más relevantes

- ¿Qué cualidad aprecias más en una mujer?- En este caso no aplico la diferencia de género por lo que persisto en la generosidad.

- Tu virtud preferida.- La fuerza de voluntad, con una buena dosis a mano siempre se llega a donde se quiere llegar, no importa cuán largo sea el camino, ni cuánto esfuerzo requiera, siempre me ha parecido una imprescindible herramienta de poder sobre uno mismo.

- Tu actividad preferida.- Desde que me comprometí seriamente con las palabras, mi relación con la escritura se ha convertido en mi principal alimento, escribir es una necesidad, una adicción que no por adictiva deja de ser placentera, por lo que podría decirse que actualmente mi actividad preferida sería la escritura, obviamente, para poder escribir se necesita, al menos yo así lo experimento, otro ingrediente básico, la lectura.

- ¿Quién o qué te hubiera gustado ser?- En broma solía decir que, en otra vida, me hubiera gustado ser mejillón, con el propósito de pasar las horas con las valvas abiertas ingiriendo alimento, sin despertadores, sin enfermedades, sin dolor, sin guerras y sin preocupaciones. Pero un buen día alguien me explicó las técnicas que se utilizan para la recolección industrial de los mejillones y se me pasaron las ganas de pertenecer a la familia de los bivalvos, así que mejor seguir siendo yo misma.

- La característica principal de tu carácter.- Dicen que soy una persona muy conciliadora, que siempre busco un modo o manera para solventar las situaciones de la manera más pacífica posible, y como siempre he considerado que los demás (los que bien te conocen) tienen una mejor visión de ti que uno mismo, les haré caso.

- ¿Qué aprecias más de los amigos?- Su cercanía, el saber que siempre están ahí, y ese tremendísimo calor que irradian y que me llega a raudales.

- Tu mayor fallo.- La impaciencia. En mi caso es aguda y la sufro, puesto que en muchas ocasiones me crea ansiedad y me lleva a la precipitación que, obviamente, no es una buena consejera casi nunca.

- Tu sueño de felicidad.- Dejar de sentir dolor. Debido a las dos enfermedades crónicas que me aquejan, llevo conviviendo con él demasiado tiempo y no es fácil, me gustaría poder responder a esa pregunta tan común: ¿cómo estás?, con un maravilloso “¡estupendamente!”.

- ¿Qué te gustaría ser?- ¿Aparte de un mejillón? Bueno, creo que me encantaría llegar a ser un buen poeta. ¿Y qué entiendo yo por “buen poeta”? Pues ser capaz de provocar una tremenda sensación de sed en las fibras del lector.

- Tu color favorito.- El negro, aunque repudiado por muchos, el negro es un color que me transmite belleza, ternura y enigma, ingredientes valiosísimos para convertirlo en un estupendo laboratorio de trabajo poético.

- Tu flor favorita.- La amapola. Siempre me ha transmitido una sensación de fuerza, sí, sí, la frágil amapola está emparentada con los opiáceos, se utiliza a veces como adormidera (suave), y en su fragilidad encierra, según como se mire, esa ingravidez que la hace aún más etérea, no sé, es una flor que me recuerda en cierto modo que no es tan importante aferrarse demasiado al mundo.

- Tu pájaro favorito.- El águila. Imagino que en contraposición con mis preferencias florales, el águila, siendo una de las aves depredadoras de mayor tamaño, siempre me ha transmitido la sensación de “fragilidad” del ser humano, me siento pequeñita ante esos majestuosos animales.

- Tu escritor favorito.- No puede haber un favorito, sería injusto reducir mis “adicciones” a un sólo autor, pero si hay que nombrar a alguien, diría Tolkien, su capacidad para crear mundos, idiomas y grupos sociales es tan absolutamente compleja que siempre me desborda.

- Tu poeta favorito.- Aquí sí que no puedo nombrar tan sólo a uno, así que nombraré a algunos que han influido de forma directa sobre mi proceso poético: Huidobro, Girondo, Montalbán, Rosales, E. Moga, Sonia Fides, entre otros.

- Tus héroes en la actualidad.- Llevo un ratillo pensando, la verdad, no sé qué responder, creo que no me he guardado ninguno en el bolsillo, el último se cayó del pedestal hace tiempo y no he llegado a remplazarlo.

- Tus heroínas en la historia.- Es que a mí esto de hablar de héroes o heroínas no me va mucho, creo que en realidad todos llevamos una parte heroica y otra antiheroica que a veces puede resultar hasta más efectiva que la primera, por supuesto que en la historia ha habido personajes “eminentes” y que sin duda han hecho “grandes” cosas, pero tan heroico puede resultar ir a buscar patatas en plena guerra civil, escondiéndolas en el refajo de las faldas (como me contaba mi abuela), para poder dar de comer a una familia, como, actualmente, conseguir llegar al final del día y no sentirnos míseros. La mayor de las heroicidades para mí es seguir viviendo dignamente.

- Tu nombre favorito.- Me gustan mucho los nombres hebreos, Judith siempre me ha parecido de una sonoridad y textura preciosas.

- ¿Qué aborreces por encima de todo?- La intransigencia, porque aborta cualquier intento de entendimiento, y eso me parece la mayor de las estupideces.

- ¿Qué figuras históricas aborreces más?- Tal y como he apuntado en la pregunta anterior, aquellas que por su intransigencia, fanatismo y sentido de la superioridad han acometido y acometen actos de sumisión, control o, llevado al máximo exponente, exterminio.

- ¿Qué méritos militares aprecias más?- Ninguno, así, sin paliativos.

- ¿Qué reformas admiras más?- Aquellas que han conseguido hacer respetar algo tan básico e irrenunciable como los derechos humanos, aunque tiene “guasa” que entre los “seres humanos” tengamos que mantener una “lucha abierta” para que éstos se respeten, y a tenor de lo que vemos a diario no lo hemos conseguido del todo.

- ¿Qué don natural te gustaría poseer?- La compasión en su sentido no tan cristiano como budista, es decir, la capacidad para comprender a los demás, ser capaz de ponerse en la piel del otro, creo que es el modo más directo y completo de conocimiento.

- ¿Cómo te gustaría morir?- Sin dolor y acompañada de la sonrisa de los míos.

- Tu actual estado de ánimo.- En el filo de lo imposible, agarrada a la boca del infierno y deletreando un dolor líquido con la yema de mis ojos.

- Tu lema. - “Si tantas veces tiras a portería, al final marcas gol”.

abril 16, 2010

EUGENIO MONTALE


"... Y todavía pienso que el arte es la forma de vida de quien no vive: una compensación o una sustitución. Un poeta no debe renunciar a la vida. Es la vida la que se encarga de escapársele"

EUGENIO MONTALE
Párrafo extraído de INTENCIONES entrevista imaginaria.
Imagen: La creación de Adán (detalle manos) Miguel Ángel

abril 14, 2010

EL COLIBRÍ BLANCO

LA REUNIÓN

No estábamos todos, pero casi. Tan sólo Germán manifestó que no rompería su promesa de no volver. Lo juró por su vida y no deseaba contrariar a los dioses. Huir vivo de aquel país en guerra fratricida fue suficiente para convertirse en un apátrida, en un atlante satisfecho de no tener bandera a la que servir. Los demás pensaban que hacía tiempo que había prescrito el pacto y que, muerto el dictador, ya no había peligro para nadie. Incluso pensaron que una vez restablecida la joven democracia, su deber era rendir tributo a la persona que les había salvado la vida. Antonio se negó en rotundo a ello. Les reiteraba la promesa que habían jurado cumplir, al fin y al cabo el destierro era un mal menor, sobre todo si lo encarábamos a la muerte. Debía tener el alma atenazada por el miedo a que se descubriese la verdad y alguien le ajustara las cuentas.

ESTEBAN GUTIÉRREZ GÓMEZ
Fragmento de El Colibrí Blanco (EH EDITORES 2008)
Imagen: laeternaconjuradelosnecios.blogspot.com

abril 12, 2010

NADIEZHDA MANDELSTAM




La rusa Nadiezhda Mandelstam (1890-1980), esposa del célebre poeta acmeísta Ossip Mandelstam, describió en sus memorias (Contra toda esperanza) los sufrimientos de los intelectuales que en su país fueron acorralados por el terror estalinista. Su marido, exiliado en Voronezh, falleció cuando lo trasladaban a Siberia.

Un fragmento de Contra toda esperanza:

Durante el invierno, Voronezh era un vasto y compacto campo de hielo siempre resbaladizo, como dice Ajmátova en su poema: “De cristales de roca que piso tímidamente”… Ni siquiera en las grandes ciudades, que nos estaban prohibidas, seguían existiendo los porteros provistos de palas y arena. Mandelstam no temía ni al viento ni al hielo. A veces la ciudad le encantaba, pero la mayor parte del tiempo la maldecía y anhelaba escaparse. Le atormentaba estar encadenado a un lugar fijo como si estuviese tras unas puertas cerradas. “Por naturaleza soy un hombre que espera”, decía, “y encima me mandan a Voronezh para que pase esperando todo el tiempo”... En efecto, nuestra vida se reducía a una espera constante: esperábamos dinero, la respuesta a una carta o a una solicitud, un gesto magnánimo o la salvación… Pero nunca conocí a una persona que viviese con tanta avidez el presente como él. Percibía casi físicamente la dimensión del tiempo, de cada minuto de esta vida. En ese sentido era la más completa antítesis de Berdiaev, quien decía que jamás pudo resignarse al tiempo y que toda angustia expresaba la nostalgia de la eternidad. Creo que para todo artista la eternidad se hace perceptible en cada instante que existe y transcurre, instante que él detendría encantado para hacerlo aún más perceptible. La nostalgia del artista no es producida por el anhelo de eternidad, sino por la pérdida temporal del sentimiento de que cada segundo tiene volumen, es ubérrimo, está lleno de sentido y equivale, por sí mismo, a cualquier eternidad. En la angustia, como es natural, se originaba el sentimiento del futuro y Mandelstam se convertía en el hombre “que espera”.

NADIEZHDA MANDELSTAM
Fragmento del libro Contra toda esperanza (Alianza Tres; Madrid, 1984). Traducción: Lydia K. de Velasco.
Imagen: jornada.unam.ru

abril 10, 2010

JOSÉ ÁNGEL VALENTE



CONSIENTO

Debo morir. Y sin embargo, nada
muere, porque nada
tiene fe suficiente
para poder morir.
No muere el día,
pasa;
ni una rosa,
se apaga;
resbala el sol, no muere.
Sólo yo que he tocado
el sol, la rosa, el día,
y he creído,
soy capaz de morir.

JOSÉ ÁNGEL VALENTE
Imagen de la web

abril 09, 2010

HE LEÍDO


Hace unos días leí un artículo titulado: ¿A qué le sabe su pareja? Había diferentes sabores, el que más me llamó la atención fue uno titulado "El restaurante de mi erótica" de Isabel Pozueta y decía así: En el restaurante de mi erótica, de mi deseo, hay un sabor que supera a todos los demás y es el sabor a ti. Si tu olor me seduce, tu sabor me pierde. Pero realmente ¿a qué me sabes? Mis labios y lengua te chupan y lamen acercando a mis papilas el sabor de tu piel. Diría que unas veces sabes a mar y a viento, a muchas cosas y a nada en concreto, sabes rico como el chocolate negro y en ocasiones agrio como el limón. Sabes a lo que deseo, sabes a lo que me excita, a lo que me atrae... Ese sabor tan especial que, ya sea en presencia o en fantasía, me acerca a ti.

abril 08, 2010

WISLAWA SZYMBORSKA



"Te he sobrevivido suficiente como para recordar desde lejos"


Imagen: Paula Rego

abril 07, 2010

RAMÓN MARÍA DEL VALLE-INCLÁN



Ramón María del Valle-Inclán (Villanueva de Arosa, 1866 – Santiago de Compostela, 1936), dramaturgo, novelista y poeta, es uno de los principales autores españoles del siglo XX. Junto a novelas como Sonata de otoño (1902), Sonata de estío (1903), Sonata de primavera (1904), Sonata de invierno (1905), la serie La guerra carlista (1908-1909), Tirano Banderas (1926) y la serie El ruedo ibérico (1927-1936), o piezas de teatro como El Marqués de Bradomín (1906), las Comedias bárbaras (1907-1923), Divinas palabras (1919) y Luces de bohemia (1920), publicó los libros de versos Aromas de leyendas (1907), La pipa de kif (1919) y El pasajero (1920), estos tres reunidos en el volumen Claves líricas (1930).

Un poema:

ROSA DE SANATORIO

Bajo la sensación del cloroformo
me hacen temblar con alarido interno
la luz de acuario de un jardín moderno,
y el amarillo olor del yodoformo.

Cubista, futurista y estridente,
por el caos febril de la modorra
vuela la sensación, que al fin se borra,
verde mosca, zumbándome en la frente.

Pasa mis nervios, con gozoso frío,
el arco de lunático violín;
de un sí bemol el transparente pío

tiembla en la luz acuaria del jardín,
y va mi barca por el ancho río
que separa un confín de otro confín.

RAMÓN MARÍA DEL VALLE-INCLÁN
Poema incluido en el libro La pipa de kif (1919).
Imagen: parentesys.es

abril 06, 2010

MÚSICA EN ÍTACA (8)

LEONARD COHEN


“Él nace en una familia de inmigrantes conservadores. Su padre, militar, viene de Bielorrusia. La madre, judía lituana que enseña al hijo los cánticos religiosos, huye del estalinismo. Leonard dice no sufrir por las reglas estrictas de la casa, y sólo la muerte paterna evita su ingreso en el ejército profesional.

Antes de comenzar los estudios universitarios, memoriza las páginas de Federico García Lorca y Willian Butler Yeats, y aprende el cancionero folk. Después, las aulas son un albergue para tocar el banjo y la guitarra con los amigos. De noche, sobre un fondo de música de jazz, lee en público sus poemas.

A los veintiún años publica el libro de versos Let us compare mythologies, y en la naturaleza del joven se perciben los dos hilos rojos que lo conducen hasta la vejez: la austeridad y un deseo de escapar del remolino urbano. La escritura le parece “lo contrario de la abundancia, lo contrario del lujo. Es más bien un trabajo de trapero”. En 1959 se establece en Hydra, isla griega al sur de Atenas, donde lleva una vida de artista sobrio y apartado.

(…)

En la última década del siglo XX, Cohen se adhiere a una comunidad zen afincada en Mont Baldy, en las cercanías de Los Ángeles, y dirigida por el monje octogenario Sasaki. Se levanta a las dos de la mañana; medita; friega una pila de tazones, cucharas y palillos; prepara el desayuno de los compañeros”.


FRANCISCO JAVIER IRAZOKI

(Fragmentos del libro La nota rota; Hiperión, 2009)

abril 04, 2010

LOS ESCRITORES Y EL CUESTIONARIO PROUST: RICARDO MENÉNDEZ SALMÓN (11)

-¿Cuál es para ti la mayor desgracia?

- La injusticia.

- ¿Dónde te gustaría vivir?

- Soy feliz en Gijón, pero no querría morir sin conocer Polinesia.

- ¿Cuál es para ti la alegría terrenal más perfecta?

- La fraternidad.

- ¿Qué fallo perdonas más fácilmente?

- La ira.

- Tu héroe de ficción preferido.

- Fabricio del Dongo.

- Tu personaje histórico preferido.

- Lenin.

- Tu heroína real preferida.

- Vera Zasúlich y las comuneras de 1871.

- Tu heroína preferida de la literatura.

- Antígona.

- Tu pintor favorito.

- Egon Schiele.

- Tu compositor preferido.

- Franz Schubert.

- ¿Qué cualidad aprecias más en un hombre?

- La inteligencia.

- ¿Qué cualidad aprecias más en una mujer?

- La inteligencia.

- Tu virtud preferida.

- La justicia.

- Tu actividad preferida.

- Leer.

- ¿Quién o qué te hubiera gustado ser?

- John Coltrane.

- La característica principal de tu carácter.

- El inconformismo.

- ¿Qué aprecias más de los amigos?

- La generosidad.

- Tu mayor fallo.

- Mi voluntad flaquea a menudo.

- Tu sueño de felicidad.

- Un mundo sin clases y en paz.

- ¿Qué te gustaría ser?

- Ahora mismo, un buen padre.

- Tu color favorito.

- El verde.

- Tu flor favorita.

-No me gustan las flores. Si sirve un árbol, el roble.

- Tu pájaro favorito.

- El albatros.

- Tu escritor favorito.

- William Faulkner.

- Tu poeta favorito.

- Yorgos Seferis.

- Tus héroes en la actualidad.

- No los tengo.

- Tus heroínas en la historia.

- Quedó dicho: Vera Zasúlich y las comuneras de 1871.

- Tu nombre favorito.

- Antonio.

- ¿Qué aborreces por encima de todo?

- La frivolidad.

- ¿Qué figuras históricas aborreces más?

- De la historia reciente de nuestro país, a José María Aznar.

- ¿Qué méritos militares aprecias más?

- Ninguno.

- ¿Qué reformas admiras más?

- Las que colaboran a la emancipación de la inteligencia.

- ¿Qué don natural te gustaría poseer?

- La música, aunque no sé si es un don natural.

- ¿Cómo te gustaría morir?

- Consciente.

- Tu actual estado de ánimo.

- Brumoso, como (casi) siempre.

- Tu lema.

- Nec metu, nec spe. Sin miedo ni esperanza.